La concejala de Juventud e Infancia del Ayuntamiento
de Coslada, Macarena Orosa, ha estado presente esta mañana en el centro
cultural Margarita Nelken en la clausura del proyecto de Aprendizaje Servicio de Memoria
Histórica, en el que han tomado parte 70 mayores de Coslada y
San Fernando y estudiantes de 4º de la ESO del IES Miguel
Catalán. El proyecto se ha impulsado desde las Concejalías de Mayores y Juventud.
En su
intervención, Macarena Orosa, ha introducido el concepto de
generactividad que es «la capacidad que en general todos los seres
humanos tenemos para transmitir a otras generaciones algo nuestro. Es uno de
los lazos que unen niños, jóvenes, adultos y personas mayores. Este concepto da
importancia a la persona mayor como propulsora de diversas acciones sociales
que dan protagonismo activo a los mayores y a sus aportaciones».
En
la clausura del APS, un grupo de mayores ha realizado una lectura
dramatizada del libro La cáscara amarga, de la escritora Pilar
Zapata, de quien se da la circunstancia de que fue profesora del IES
MIguel Catalán de Coslada. Este libro, galardonado con el premio de la Fundación
Antonio Machado de Collioure, tiene
como protagonistas a personajes que
vivieron la posguerra, la transición y la época de hoy, que comparten la
necesidad de mantener la memoria activa para que la Historia no acabe en el
olvido.
El APS sobre Memoria Histórica, en
la edición de este año, comenzó a desarrollarse en el mes de febrero con encuentros
intergeneracionales en los que los mayores han transmitido sus vivencias y
en los que los jóvenes han podido constatar la evolución de la sociedad en sus
valores y costumbres. Posteriormente también se han realizado visitas a museos
con los mayores como guías.
De esta forma se ha facilitado que el
alumnado adquiera conocimientos sobre nuestra historia reciente, a través de la
relación con las personas que vivieron aquella época y hoy viven y participan
en su comunidad desde los centros municipales de mayores de Coslada y desde
la residencia AMAVIR de San Fernando.
Para los y las mayores, participar en estas
experiencias, les hace sentir que todavía mantienen la capacidad de ser parte
activa de la sociedad y de intervenir en los procesos de transformación de la
misma. De esta forma, afrontan el envejecimiento desde una perspectiva positiva
por el reconocimiento que se les da en su labor de transmisión del conocimiento
y por el capital humano que atesoran.
El IES Miguel Catalán, ha sido un
centro pionero en la aplicación de los APS
y fue reconocido con un premio estatal en 2016 por su proyecto
«Generacción», que aglutinaba cuatro iniciativas
intergeneracionales: Huerto, Visitas al Museo Arqueológico, Memoria Histórica y
Juegos con enfermos de Alzheimer.
