El alcalde de Coslada, Ángel Viveros,
y el concejal de Política Territorial, José Sousa, han visitado esta
mañana las instalaciones de la antigua escuela Chiquitín, donde está previsto
que se trasladen los niños y niñas de 0 a 2 años de la escuela Charlie Rivel
durante el próximo curso.
Se trata de un solución provisional hasta que la
Comunidad de Madrid construya la nueva Escuela Charlie Rivel. El actual
edificio tiene problemas estructurales que se arrastran desde hace años sin que
la administración autonómica haya avanzado en la construcción del nuevo centro,
para el que el Ayuntamiento de Coslada cedió una parcela.
Las obra
en la antigua escuela Chiquitín cuenta con una inversión inicial prevista de 45.000
euros. Consistirá en diversas intervenciones para acondicionar y adaptar el
inmueble, actualmente sin uso y con gran parte de las instalaciones deterioradas.
Actuaciones
En las
aulas, además del pintado, se procederá instalar persianas de aluminio y estores enrollables de tela. Además, se abrirán huecos
de paso entre aulas con puerta de vaivén, con vidrio y con protecciones para
uso infantil.
En los aseos de las aulas se harán
trabajos de albañilería para reponer suelos y revestimientos y se repondrán
griferías, sifones botella y sus correspondientes conexiones con la instalación
de fontanería y saneamiento en un porcentaje alto de los lavabos existentes. Se
repondrán de algunos lavabos deteriorados o retirados, así como asientos y
tapas de inodoro.
Por último, se ampliará el
espacio de uso para cocina incorporando el almacén y el cuarto de basuras
actual. A la cocina se le dotará de los equipos industriales y
electrodomésticos que en su mayoría serán trasladados desde la actual escuela.
El concejal de Política Territorial,
José Sousa, ha asegurado durante la visita que “las obras que se llevan a
cabo están cumpliendo los plazos previstos, de manera que tenemos previsto
llegar sin problema con el fin de las obras para cuando dé inicio el curso
escolar”.
Sin
solución desde hace doce años
Han pasado 12
años desde que el Ayuntamiento de Coslada incluyera la nueva Escuela Infantil
Charlie Rivel en el Plan PRISMA de 2008-2011.
Ante el último
retraso de las obras licitadas en 2017, en mayo de 2020, es decir, en plena
pandemia, la Consejería de Educación propuso que, ante el cierre de la Charlie
Rivel, se podría producir el traslado al edificio que ocupaba la Escuela Oficial de Idiomas. El
Ayuntamiento, tras escuchar a madres y padres, rechazó la
medida y se buscó la opción de hacer obras en el centro que permitieran su
continuidad únicamente durante el presente el curso 2021-22.
La solución de urgencia que ha adoptado ahora el
Ayuntamiento de Coslada, ante la falta de respuesta de la Comunidad, es
habilitar seis aulas en las antiguas instalaciones de la escuela Chiquitín para
los niños de entre 0 y 2 años y otras seis de 2 a 3 años en el Colegio San
Pablo, donde en breve se iniciarán los trabajos de reforma.
El
alcalde de Coslada, Ángel Viveros, ha vuelto a denunciar la posición de la
Comunidad de Madrid con este tema al recordar que “nuestra ciudad
lleva más de una década esperando por esta escuela. El Ayuntamiento ha cumplido
con su parte con la cesión de la parcela en el Barrio del Puerto, la
consignación de una partida para ampliar el número de aulas en la nueva Charlie
Rivel y llegar a 12, ante las demoras del Gobierno regional, Coslada ha
invertido dinero público en, primero, adecuar la antigua escuela y ahora
preparando de manera transitoria el centro Chiquitín y las aulas del San Pablo.
La que no ha cumplido ha sido la Comunidad de Madrid”.
El
regidor, a modo de conclusión, ha indicado que “seguiremos
insistiendo para que se cumpla este compromiso y se dote a Coslada de la nueva
escuela infantil Charlie Rivel”.