50 años del golpe militar que derrocó al Gobierno de Unidad Popular chileno
Organizado por el área de Participación Ciudadana y Cooperación del Ayuntamiento de Coslada y la asociación Obatalá, esta mañana ha tenido lugar en el parque que lleva su nombre un acto de homenaje y recuerdo de Salvador Allende, coincidiendo con el 50º aniversario de su muerte y del golpe militar que estableció una dictadura en Chile durante casi dos décadas.
Al acto han asistido Elena Lebrato, concejala de Participación Ciudadana y Cooperación y el Presidente de Obatalá, Agustín González. Asimismo han acudido distintos miembros de la Corporación municipal y representantes de asociaciones del municipio.
El acto ha consistido en una ofrenda floral frente al monolito de Salvador Allende. También se ha podido escuchar el último discurso del Presidente cuyo pasaje más recordado es el que dice “sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor“.
El golpe de Estado en Chile del 11 de septiembre de 1973 fue una acción militar llevada a cabo por las Fuerzas Armadas de Chile comandadas por Augusto Pinochet para derrocar al presidente Salvador Allende y al gobierno de la Unidad Popular. Tropas del ejército y aviones de la Fuerza Aérea atacaron el Palacio de La Moneda, la sede de gobierno. Allende falleció mientras las tropas militares ingresaban al Palacio.
El golpe desencadenó una dictadura militar que se extendió hasta 1990. Durante este periodo, fueron cometidas sistemáticas violaciones a los derechos humanos, se limitó la libertad de expresión, se suprimieron los partidos políticos y el Congreso Nacional fue disuelto.
Sobre Allende
Salvador Guillermo Allende Gossens fue un médico cirujano y político socialista chileno, presidente de Chile desde el 3 de noviembre de 1970 hasta el día de su muerte el 11 de septiembre de 1973.
Por primera vez en la historia del mundo occidental, un candidato marxista llegaba a la presidencia de la República a través de las urnas.
Durante su gobierno, el Congreso aprobó la Ley para la Nacionalización de la Gran Minería del cobre. En el aspecto económico, se instauró una política de acentuada redistribución del ingreso y de reactivación de la economía. La Ley de Reforma Agraria, aprobada durante la presidencia anterior, le permitió avanzar rápido en la expropiación de grandes latifundios. Dio los primeros pasos para construir el área de propiedad social de la economía, usando procedimientos legales que no cuestionaban la juridicidad del sistema vigente.